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A fin de analizar el Proyecto de Ley de Promoción de las Economías Regionales, la Senadora Nacional Cristina Fiore, quien preside la Comisión de Economías Regionales, Economía Social, Micro, Pequeña y Mediana Empresa de la Cámara Alta; junto a su asesora, Paola Tenutta, se reunieron con Eduardo Rodríguez, titular del sector del área de producción primaria de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME); Edoardo Fracanzani, director ejecutivo de la Cámara Argentina del Maní, entidad adherida a la Red CAME; y Ezequiel Garbers, socio de la Cámara de Industriales Arroceros Argentina.
“Recibimos muy bien la propuesta de darle un marco regulatorio a las economías regionales”, afirmó la senadora Fiore con respecto a la iniciativa presentada por la Confederación Intercooperativa Agropecuaria Limitada (CONINAGRO), la que se irá trabajando junto a los distintos sectores productivos involucrados.
La funcionaria nacional y su asesora tomaron nota de las sugerencias e inquietudes planteadas, en primer lugar, por el representante del sector manisero, Edoardo Fracanzani, quien manifestó su preocupación en relación a algunos puntos del Proyecto de Ley de Promoción de las Economías Regionales.
En primer lugar, planteó su inquietud por el contenido del Artículo 4°, que crea la condición de ERPyME, excluyendo del proyecto a las grandes empresas, que también conforman el universo de las llamadas “Economías Regionales”. Al respecto, el representante del sector manisero aseguró que al analizar los clúster de Argentina y del mundo, integrados por pymes y por grandes empresas, puede observarse una gran y enriquecedora interacción entre ambas en pos del desarrollo del sector. A modo de ejemplo, Fracanzani mencionó que las empresas grandes tienen la posibilidad de invertir en conocimiento y desarrollo, hecho que beneficia a todas las empresas del sector, sin distinción de tamaño, por lo que promocionar actividades de investigación y desarrollo es fundamental para aumentar la competitividad y el desarrollo de los diversos sectores productivos a mediano y largo plazo.
En ese sentido, Ezequiel Garbers, representante del sector arrocero, compartió la postura del dirigente del maní, tendiente a evitar que se generen desbalances entre los distintos tipos de empresas. Además de afirmar que la interacción entre pymes y grandes es necesaria para el desarrollo de ambas, ya que una sin la otra no podrían alcanzarlo, agregó que esta vinculación potencia el funcionamiento de los clúster, integrado por muchos perfiles de industrias.
Por otra parte, el dirigente del arroz solicitó incorporar al Proyecto de Promoción, y para las empresas de mayor tamaño, el beneficio que tienen las pymes – a través de la Ley Pyme - que realizan inversiones.
En referencia a las economías regionales que se tipifican en el documento para ser objeto de Ley figuran los “granos”, denominación muy amplia frente a la cual el director ejecutivo de la Cámara del Maní solicitó agregar una especificación de su producto, a fin de diferenciar al maní de los commodities.
Por último, y con respecto a la propuesta de creación de diversos organismos y/o instrumentos (como, por ejemplo, el Foro Ejecutivo de Economías Regionales y el Fondo Anticíclico para las Economías Regionales), Fracanzani planteó su inquietud de que ésto implique un mayor nivel de burocratización, causando dificultades al momento de tener que implementar administrativamente las medidas.
Ambos dirigentes abordaron, también, el estado de situación del sector exportador, y se comprometieron a presentar todas sus sugerencias por escrito, a fin de poder tener participación en los debates cuando el Proyecto de Ley de Promoción de las Economías Regionales se trate en Comisión.
Se analizó el Proyecto de Ley de Promoción de las Economías Regionales
La funcionaria nacional y su asesora tomaron nota de las sugerencias e inquietudes planteadas, en primer lugar, por el representante del sector manisero, Edoardo Fracanzani, quien manifestó su preocupación en relación a algunos puntos del Proyecto de Ley de Promoción de las Economías Regionales.
En primer lugar, planteó su inquietud por el contenido del Artículo 4°, que crea la condición de ERPyME, excluyendo del proyecto a las grandes empresas, que también conforman el universo de las llamadas “Economías Regionales”. Al respecto, el representante del sector manisero aseguró que al analizar los clúster de Argentina y del mundo, integrados por pymes y por grandes empresas, puede observarse una gran y enriquecedora interacción entre ambas en pos del desarrollo del sector. A modo de ejemplo, Fracanzani mencionó que las empresas grandes tienen la posibilidad de invertir en conocimiento y desarrollo, hecho que beneficia a todas las empresas del sector, sin distinción de tamaño, por lo que promocionar actividades de investigación y desarrollo es fundamental para aumentar la competitividad y el desarrollo de los diversos sectores productivos a mediano y largo plazo.
En ese sentido, Ezequiel Garbers, representante del sector arrocero, compartió la postura del dirigente del maní, tendiente a evitar que se generen desbalances entre los distintos tipos de empresas. Además de afirmar que la interacción entre pymes y grandes es necesaria para el desarrollo de ambas, ya que una sin la otra no podrían alcanzarlo, agregó que esta vinculación potencia el funcionamiento de los clúster, integrado por muchos perfiles de industrias.
Por otra parte, el dirigente del arroz solicitó incorporar al Proyecto de Promoción, y para las empresas de mayor tamaño, el beneficio que tienen las pymes – a través de la Ley Pyme - que realizan inversiones.
En referencia a las economías regionales que se tipifican en el documento para ser objeto de Ley figuran los “granos”, denominación muy amplia frente a la cual el director ejecutivo de la Cámara del Maní solicitó agregar una especificación de su producto, a fin de diferenciar al maní de los commodities.
Por último, y con respecto a la propuesta de creación de diversos organismos y/o instrumentos (como, por ejemplo, el Foro Ejecutivo de Economías Regionales y el Fondo Anticíclico para las Economías Regionales), Fracanzani planteó su inquietud de que ésto implique un mayor nivel de burocratización, causando dificultades al momento de tener que implementar administrativamente las medidas.
Ambos dirigentes abordaron, también, el estado de situación del sector exportador, y se comprometieron a presentar todas sus sugerencias por escrito, a fin de poder tener participación en los debates cuando el Proyecto de Ley de Promoción de las Economías Regionales se trate en Comisión.
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