Para las PyMES terminar con una posición dominante en el negocio de las tarjetas y medios electrónicos de pago significará mayor competencia en el mercado, que claramente beneficiará a los comercios, consumidores y la economía en general, ya que se podrán ofrecer más formas de financiamiento, menores costos de mantenimiento y, por ende, mayor transparencia gracias a que más locales podrán adherirse al sistema.

La empresa PRISMA actualmente es la única que ofrece a comercios la marca Visa y es propiedad de Visa Internacional y 14 bancos que operan en Argentina.

Cabe recordar que el año pasado CAME luchó por una ley de tarjetas para reducir los costos de las comisiones. Dicha iniciativa alcanzó media sanción en el Senado por unanimidad y luego fue aprobada también en Diputados con modificaciones.

Finalmente, por acuerdo entre CAME y ATACYC, la Cámara que nuclea a las tarjetas, se firmó un convenio que establecía que a partir de abril el máximo que pueden cobrar a los comercios es del 2,5% por cada operación con tarjeta de crédito y 1,2% con débito y descenderá de forma escalonada hasta 1,8% y 0,8% en 4 años.