La confianza de los empresarios pyme se retrajo por segundo mes consecutivo, al caer 6,0% mensual en mayo y ubicarse en el nivel más bajo en 10 meses. Frente al mismo mes del año pasado, resultó 10,3% menor.
En la comparación interanual, los más afectados fueron los industriales, cuyo nivel de confianza fue 13,2% menor a mayo 2022, mientras que, en los comerciantes, resultó 8,3% inferior.
Las menores expectativas futuras fueron lo más determinante en el resultado. Los empresarios están preocupados por la inflación, el dólar, la escasez de algunos insumos, la presión fiscal, y la falta de definiciones sobre quienes serán los candidatos presidenciales. Esto último, demora el conocimiento de las propuestas para abordar los problemas que enfrentan hoy las empresas. Así, las expectativas futuras de los industriales pyme cayeron 9,7% en el mes mientras que en los empresarios del sector comercio, bajaron 11,5%.
Los datos surgen del Índice de Confianza Pyme (ICPyme) que elabora la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) para captar el ánimo del empresario en base a tres variables: la situación presente de su empresa, sus expectativas de evolución futura y sus intenciones de inversión.
Las pymes trabajaron en mayo con niveles de confianza de 56,5 puntos, teniendo como referencia una escala de 0 a 100 (donde 0 es confianza nula y 100 confianza plena). Es decir, la brecha con nivel de confianza plena es de 43,5 puntos.
Análisis sectorial
Percepción sobre la situación presente: en la comparación mensual, la percepción de la situación presente de las empresas bajó 4,8% en la industria y 4,9% en el comercio. En la comparación interanual, la percepción de la industria fue 21,4% menor que en mayo 2022 y la del comercio se ubicó 8,6% por debajo de ese mes. Si bien la caída en la industria fue más profunda, la confianza de los industriales en la situación actual de su empresa es apenas 2,8% menor a los comercios. En las industrias el mes estuvo marcado por la pérdida de rentabilidad que provoca la inestabilidad macro. Y en el comercio, se comenzó a notar la pérdida de ingresos y la menor demanda de consumo.
Expectativas futuras: Las expectativas de los comercios minoristas bajaron 11,5% mensual, y 10,5% interanual. Para los industriales bajaron 9,7% mensual, y 9,9% interanual. Los industriales son más escépticos que los comercios en lo que esperan hacia adelante, porque suelen ser más las variables de incidencia en el rumbo de su empresa que hoy los afectan negativamente. Por eso el subindicador que mide expectativas futuras es 6,2% menor en la industria que en el comercio.
Intenciones de inversión: En mayo, las intenciones de inversión tuvieron una desmejora mensual de 1,2% en el comercio y de 1,1% en la industria. En los dos sectores se ubicaron además por debajo del mismo mes del año pasado (-4,8% en la industria y -5,2% en el comercio). Este sub indicador es el más bajo de los tres componentes del ICPyme. Se ubica en un promedio de 50 puntos tanto para la industria como para el comercio y refleja un contexto poco atractivo para invertir. Las empresas igualmente mantienen su proceso inversor porque la economía, mal o bien, crece, pero prudentemente.