Unos meses antes de recibirse de diseñadora, con su característico espíritu audaz y decidido, la vicepresidenta 2° de CAME, Gisela Santalucía, decidió instalar su propio negocio en Almafuerte: la marca de alta costura Hadas Atelier.

Transcurrieron los años y Gisela había hecho realidad muchas de sus metas, sin embargo, algo le inquietaba en su interior. Cada vez que regresaba a Catamarca, para visitar a su familia, se enamoraba más y más de las tierras, el paisaje y las vicuñas.

“Después de tanto sentir tuve que saltar”, afirmó. La decisión fue cerrar el negocio de tantos años, dejar Córdoba por Catamarca -donde estaba su padre como productor de vicuña-, unirse y empezar a trabajar en este apasionante proyecto: una empresa familiar que trabaja en equipo: “Punna Vicuña”

En la actualidad, la pyme realiza diferentes productos sustentables, como el fieltro, el cual se obtiene a partir del desecho de cerdas y motas y lo usan para la fabricación de zapatos y botas. Además, hacen hilados orgánicos con técnicas ancestrales respetando el trabajo y dedicación de cada artesano, que con sus manos laboriosas y hábiles, dan vida a cada una de las prendas. Hoy su marca exporta a Italia.