La Mesa Agroalimentaria de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) informa que, a través de la publicación en el Boletín Oficial de la Resolución Conjunta 10/2021, la Secretaría de Alimentos, Bioeconomía y Desarrollo Regional, de la cartera agropecuaria; y la Secretaría de Calidad en Salud, del Ministerio de Salud; incorporaron los establecimientos lácteos de elaboración artesanal al Código Alimentario Argentino (CAA).

Al considerar las particularidades de la producción de leche y la elaboración de productos lácteos de pequeña escala que no estaban contemplados en la normativa vigente, la medida representa un avance para la formalización de la producción láctea artesanal con estándares sanitarios de calidad.

La inclusión del artículo 60 bis al Capítulo II "Condiciones Generales de las Fábricas y Comercios de Alimentos" define a los establecimientos artesanales como “aquellos que elaboran sus productos a partir de leche de vacunos o de otros mamíferos obtenida de tambo propio o adquirida a partir de terceros y que efectúan sus productos en forma individual, familiar o asociativa hasta un máximo de 5000 litros diarios promedio anualizados, y hasta 1000 litros/día promedio por operario de producción. El producto es elaborado en forma manual o con ayuda de herramientas semiautomáticas o automáticas, siendo la intervención directa del elaborador el componente sustancial del producto terminado”.

Asimismo, la Resolución, que entrará en vigencia a partir de los 180 días corridos desde su publicación en el Boletín Oficial, detalla cuáles son los requisitos que deberán cumplir los establecimientos, haciendo especial hincapié en los principios de sanidad animal, higiene, cuidado ambiental, buenas prácticas e inocuidad alimentaria.

Como miembro del Consejo Nacional Asesor (CONASE) de la Comisión Nacional de Alimentos, la Mesa Agroalimentaria de CAME, representada por su titular y presidente de la Asociación de Pequeñas y Medianas Empresas Lácteas (APYMEL), Pablo Villano, y por Esteban Scaramella; trabajó intensamente en dicho ámbito para que los establecimientos artesanales fueran incorporados al CAA.  

“Esta normativa representa un reconocimiento al trabajo, el esfuerzo y la inversión que realiza más del 45% del total de las industrias lácteas, actores que ya no estarán excluidos del sistema formal de comercialización de leche y otros productos lácteos”, aseguró Villano.

Para las Pymes que elaboran menos de 5000 litros diarios de leche, generadoras de empleo y arraigo en el interior del país, esta medida no solo representa una oportunidad para vender dentro del mercado interno, sino también para proyectarse a los mercados externos. “Además, fija un antecedente para que otras actividades agroindustriales puedan tener su propio establecimiento artesanal. Lo que sucedió con el sector lácteo marca un rumbo”, agregó el titular de la Mesa Agroalimentaria de CAME.   

Respecto a la elaboración de la normativa, también cabe destacar la participación del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA), la Dirección de Lechería y la Subsecretaría de Agricultura Familiar y Desarrollo Territorial, quienes contaron con el apoyo de especialistas de diversas instituciones, referentes en la materia, productores locales e internacionales.

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